martes, 28 de abril de 2015
martes, 21 de abril de 2015
HOY: primera fecha para HORAS COLABORATIVAS
Hoy es la primera oportunidad de cumplir con las horas colaborativas del mes de abril, en horario de 10 a 13 y de 14 a 16 horas. Quedan dos fechas más. Te recordamos que las horas colaborativas se cumplen cada mes, no son acumulativas y no pueden realizarse todas juntas al final. Se pasa lista. Las últimas oportunidades son:
MARTES 28: de 10 a 13hs y de 14 a 16hs
MIÉRCOLES 29: de 10 a 13hs y de 14 a 16hs.
MIÉRCOLES 29: de 10 a 13hs y de 14 a 16hs.
lunes, 20 de abril de 2015
ULRIKE GABRIEL, artista medial alemana. VIERNES 8 DE MAYO en la TAE.
EL
VIERNES 8 DE MAYO, ULRIKE GABRIEL, dará una charla abierta sobre su obra a las 17hs
en la TAE y luego, a las 19:30 hs presentará su "concierto multimedial". La entrada a la
charla es gratuita y de entrada libre hasta agotar el cupo. El
concierto se autofinanciará a través de un bono contribución de 80
pesos, en venta ese mismo día, a partir de las 11 hs. Personal del Teatro Argentino de La Plata, docentes y alumnos de la TAE, gratis
Ulrike Gabriel (1964, Alemania) investiga la realidad humana y su percepción /construcción, centrándose en los sistemas generativos. Su
trabajo incluye entornos de realidad virtual, la robótica,
instalaciones, espacios en línea colectivos, proyectos comunitarios,
máquinas líricas y formatos performativos en vivo. Ha desarrollado trabajos interactivos que utilizan la respiración, los
movimientos de los ojos y otros aspectos del cuerpo humano como una
interfaz directa.
Los proyectos diseñados por Ulrike Gabriel desarrollan un escenario
interactivo en donde las tonalidades del escenario cambian a medida en
que el observador transita por el espacio y lo explora, como por ejemplo en su obra Perceptual Arena, en la que ell espacio está compuesto por una serie de polígonos y olas de
diferentes texturas que son alterados por la percepción y las
interacciones del caminante.
Un sensor sigue al espectador y de acuerdo a sus reacciones y
movimientos frente a las diferentes figuras, acciona movimientos y
cambios en las mismas.
Por otro lado el sistema guarda un registro de las acciones de cada
visitante que se constituye en la base de las futuras experiencias que
el observador ira explorando en la medida en que avance por el espacio,
dando lugar siempre a reacciones y texturas nuevas e irrepetibles.
De tal forma la experiencia estética no es estática sino que se vuelve
histórica. Esto quiere decir que está sujeta a una constante renovación y
cambio.
Su obra trata metafóricamente la manera en cómo percibimos el mundo.
La apreciación del espacio y de lo visual varía infinitamente de persona
a persona de acuerdo a su propia visión del mundo y su recorrido a
través del mismo.
La subjetividad solo toma sentido a través de nuestras experiencias
individuales, nuestro camino es único e irrepetible. De la misma manera
la obra refleja las vivencias únicas de cada visitante. En este caso no
es solo la percepción de la obra lo que cambia, sino que la obra misma
se modifica de acuerdo a las experiencias de cada observador.
El resultado final es una abstracción digital de nuestras vivencias y
nuestro propio punto de vista. En este sentido pienso que la obra indaga
ideas interesantes y nos hacen reflexionar sobre nuestra propia
percepción y sobre la relatividad de la vida y el arte.
https://vimeo.com/47016333
https://vimeo.com/tag:ulrike+gabriel
Ulrike
Gabriel co-fundó el laboratorio Codelab, Berlín (en Residencia en
Podewil), y fue la Directora (2000-2002). Fue
profesora en la Universidad de Arte y Diseño HfG Offenbach de Alemania, donde
dirigió el área de la enseñanza de medios electrónicos y desarrolló
una enseñanza de formatos de tiempo basándose en procesos del arte ( 2008-2012). Estudió Filosofía en la Universidad Ludwig-Maximilian (1983-1985) y
Pintura y artes gráficas Aplicada de la Academia de Bellas Artes, Munich
(1985-1990). hizo su posgrado en el Instituto de nuevos medios Städelschule, Frankfurt (1991-1993). Ha
participado en diversos programas de residencia, incluyendo:
Helicopterlab, Eurocopter Alemania, Messerschmitt Bölkow Blom (1990); Canon Artlab, Tokio (1993); y V2-Organisatie, Rotterdam (1996-1998), y en festivales y galerías internacionales. Vive en Berlín.
EL VIERNES 8 DE MAYO, ULRIKE GABRIEL, dará una charla abierta sobre su obra a las 17hs en la TAE y luego, a las 19:30hs presentará su "concierto transmedial". La entrada a la charla es gratuita y de entrada libre hasta agotar el cupo. El concierto se autofinanciará a través de un bono contribución de 80 pesos, en venta ese mismo día, a partir de las 11 hs. Personal del Teatro Argentino de La Plata, alumnos y docentes de la TAE, gratis
viernes, 17 de abril de 2015
ÚNICAS FECHAS PARA LAS HORAS COLABORATIVAS DEL MES DE ABRIL
Con tu ingreso a los CURSOS DE OFICIOS de la TAE, y tal como lo explicamos en las modalidades de inscripción, aceptaste la forma colaborativa que tiene esta escuela y te comprometiste a ayudarnos tres horas mensuales realizando las tareas necesarias para el funcionamiento cotidiano de la TAE. Estas tareas pueden ser administrativas, o montajes y desmontajes de muestras ,reparaciones y limpieza de aulas y espacios de exposición. Las horas colaborativas no pueden acumularse o posponerse a otro mes, cada mes, tenés que hacer las tres horas que te corresponden.
Este mes de abril, necesitamos acondicionar la escuela para dos eventos.
PARA ESTE MES DE ABRIL, LAS ÚNICAS FECHAS POSIBLES PARA CUMPLIR CON LAS HORAS COLABORATIVAS SON:
MARTES 21: de 10 a 13hs y de 14 a 16hs
MARTES 28: de 10 a 13hs y de 14 a 16hs
MIÉRCOLES 29: de 10 a 13hs y de 14 a 16hs.
Por favor, para poder organizar las tareas, te pedimos que nos digas hasta el próximo lunes y vía mail, el día y horario en el que vamos a contar con vos. Mandanos el mail a taesecretaria@gmail.com Como título o sujeto del mail, poné HORAS COLABORATIVAS y adentro qué día y en qué horario vas a venir. Gracias!
miércoles, 15 de abril de 2015
el jueves 30 de abril, inauguramos el CINE-BAR de la TAE!!!
Cine
Bar TAE, es un espacio destinado a la proyección de cine, al aire libre o en el espacio y con la presencia de los
realizadores, comenzando con José Campusano. Comenzamos con la promoción
de obras de directores de la Provincia de Buenos Aires, buscando dar
espacio a relatos con color local y estéticas innovadoras. El día de la inauguración y con la presencia del cineasta JOSÉ CAMPUSANO y proyectaremos su obra "El perro Molina". A partir de mayo, el ciclo a cargo de Alvaro Fuentes Lenci (Lic. en
Filosofia y critico de cine) tendrán lugar los sabados cada 15 dias,
siempre con un nuevo artista invitado.
ENTRADA LIBRE Y GRATUITA HASTA AGOTAR EL CUPO.
EL PERRO MOLINA, QUINTO LARGOMETRAJE DE JOSE CELESTINO CAMPUSANO
Por Diego Brodersen para P12 el Jueves, 18 de diciembre de 2014
Hay algo del cine de un Walter Hill, y por lo tanto de western, en El Perro Molina, cualidad que ya estaba presente en films anteriores, pero nunca de forma tan evidente (a pesar de ello, Campusano niega esas referencias y filiaciones). Esa cualidad clásica, concisa, transforma el relato en una locomotora narrativa y en el film más veloz y directo en toda su filmografía. Al mismo tiempo, es su película más epidérmica, la menos compleja, y los usuales desniveles actorales del reparto le juegan aquí –a diferencia de otras ocasiones– una mala pasada, precisamente porque ese registro alejado del naturalismo choca de frente con la pertenencia a un modelo narrativo más clásico. Si en Vikingo o Fango, por caso, esa rebeldía ante el sometimiento del profesionalismo de los actores impregnaba la pantalla de realidad y realismo (que no son la misma cosa, a pesar de compartir raíz etimológica), en más de una escena de El Perro Molina los diálogos parecen prácticas recitadas del guión.
Afortunadamente, Campusano encuentra en Quaranta y en Florencia Bobadilla –como la esposa de un comisario que decide convertirse en prostituta ante sus repetidas infidelidades–, como así también en Carlos Vuletich, tres intérpretes ideales para el triángulo central de su relato de killers, canas, regresos, venganzas y amores imposibles, que por momentos funciona en un nivel cercano al melodrama criminal. Y si ese costado áspero, bruto de sus películas anteriores es aquí reemplazado en parte por cierta estilización convencional en el encuadre y la iluminación, Campusano parece haber perdido poco de su olfato para encontrar historias y contarlas de la manera más directa y genuina posible.
Dirección y guión: José Celestino Campusano.
Fotografía: Eric Elizondo.
Música: Claudio Miño.
Duración: 88 minutos.
Intérpretes: Daniel Quaranta, Carlos Vuletich, Damián Avila, Florencia Bobadilla, Assis Alcaráz, Ricardo Garino.
ENTRADA LIBRE Y GRATUITA HASTA AGOTAR EL CUPO.
EL PERRO MOLINA, QUINTO LARGOMETRAJE DE JOSE CELESTINO CAMPUSANO
Buscando la huella del cine clásico
La concisión del nuevo opus del director de Vikingo
transforma el relato en una auténtica locomotora narrativa. Al mismo
tiempo, es su película más epidérmica y los usuales desniveles actorales
del reparto le juegan una mala pasada.
Campusano
sigue haciendo la suya, despreocupado por el qué dirán, consciente de
que sus películas a la fecha (cinco largos de ficción, un documental y
algún trabajo en codirección) conforman una poética cinematográfica y
una manera de mirar el mundo definidas. Recientemente presentada en el
Festival de Mar del Plata, como casi todas sus creaciones previas, El
Perro Molina continúa investigando universos cercanos que (casi) el
resto del cine argentino ignora. Se los quiera llamar marginales o no
–eso depende en gran medida del punto de vista–, los personajes que
habitan sus películas tienen la marca de la realidad tatuada al lado de
su pertenencia al cine; son descendientes de otros seres de la pantalla
pero también –el realizador lo ha afirmado más de una vez– podrían
encontrarse en alguna esquina de cualquier suburbio bonaerense. De todas
formas, su último film trae algunas novedades y, como ocurre en toda
búsqueda, éstas conllevan sus riesgos. El Perro Molina es su película
más pulida desde el punto de vista técnico; también la más cercana en
trama, ritmo y énfasis a una idea de cine de género puro.
En su anterior Fantasmas de la ruta, el tema de la prostitución y la
corrupción enquistada en las instituciones era un punto de partida pero
también un motivo de preocupación central (de hecho, el proyecto había
surgido como una miniserie acerca de la trata de personas), y los
mecanismos de sometimiento y violencia de los responsables del negocio
caían, lógicamente, en el estrato más bajo de la amoralidad. Aquí el
tema es apenas funcional y la visión sobre quilombos, putas y fiolos
está jugada al todo o nada del romanticismo fílmico. En ese sentido, el
duro que interpreta el debutante Daniel Quaranta –héroe atípico o
antihéroe, qué más da– es el prototípico baluarte de ciertos códigos de
conducta que, se dice en varias ocasiones, está desapareciendo, un
animal en extinción en un mundo donde reina la anarquía de la violencia
más visceral, demencial incluso: no es casual que uno de los personajes
secundarios sea un enajenado con armas y el permiso para usarlas.Hay algo del cine de un Walter Hill, y por lo tanto de western, en El Perro Molina, cualidad que ya estaba presente en films anteriores, pero nunca de forma tan evidente (a pesar de ello, Campusano niega esas referencias y filiaciones). Esa cualidad clásica, concisa, transforma el relato en una locomotora narrativa y en el film más veloz y directo en toda su filmografía. Al mismo tiempo, es su película más epidérmica, la menos compleja, y los usuales desniveles actorales del reparto le juegan aquí –a diferencia de otras ocasiones– una mala pasada, precisamente porque ese registro alejado del naturalismo choca de frente con la pertenencia a un modelo narrativo más clásico. Si en Vikingo o Fango, por caso, esa rebeldía ante el sometimiento del profesionalismo de los actores impregnaba la pantalla de realidad y realismo (que no son la misma cosa, a pesar de compartir raíz etimológica), en más de una escena de El Perro Molina los diálogos parecen prácticas recitadas del guión.
Afortunadamente, Campusano encuentra en Quaranta y en Florencia Bobadilla –como la esposa de un comisario que decide convertirse en prostituta ante sus repetidas infidelidades–, como así también en Carlos Vuletich, tres intérpretes ideales para el triángulo central de su relato de killers, canas, regresos, venganzas y amores imposibles, que por momentos funciona en un nivel cercano al melodrama criminal. Y si ese costado áspero, bruto de sus películas anteriores es aquí reemplazado en parte por cierta estilización convencional en el encuadre y la iluminación, Campusano parece haber perdido poco de su olfato para encontrar historias y contarlas de la manera más directa y genuina posible.
EL PERRO MOLINA
Argentina, 2014..Dirección y guión: José Celestino Campusano.
Fotografía: Eric Elizondo.
Música: Claudio Miño.
Duración: 88 minutos.
Intérpretes: Daniel Quaranta, Carlos Vuletich, Damián Avila, Florencia Bobadilla, Assis Alcaráz, Ricardo Garino.
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